«La única alegría del mundo es comenzar»:Pavese y una tarta de queso Cuenta las almendras: regañás de almendra y semillas Sin título: Chopin y unas galletas Cosas que nunca cambian: Zambra, cerezas, helados y cartografías del abandono Rebobinar: de delante a atrás continuamente Virutas: pudín de plátano y chocolate Algunas cosas azules: huevos al parmesano y Dumas Vivir con esto: barritas de higos y queso azul Leer, cocinar, hacer fotos: frittata de brócoli Abril en la boca: bizcocho de fresas Salir de esta: galletas saladas de avena Bailando con mis miedos: La gran belleza Letras gastronómicas en Sevilla: torrijas «Como si todo estuviera al fin por acabarse, o por empezar»: Leila Guerriero y un pan denso de semillas ¿Qué le pido a la vida?: Emily Dickinson y un pan de remolcacha La sombra más viva: películas y tofu al horno con tomate Una niña de 1986: pastelitos de avena y matcha 25 de junio: tarta de cacao y café Poderosa: barquitos de cogolloss Cuando la música pare, yo seguiré bailando: Helado de frutos rojos El mundo gira «Un pasado por delante»: Tortilla de berenjenas y Yann Tiersen en Sevilla Siempre estamos de suerte: París era una fiesta y café gourmand Verano libre: cóctel de vermú Acuérdate de mi fiesta: crackers de remolacha y zanahoria El jardín del filósofo: pan de pipas Más luz: ensalada de espárragos y huevo Nunca y siempre: ensalada de alubias Apurar los días: melocotones al vino tinto Cosas conocidas y extrañas: humus de mango Danzad, comed, bebed, y que no sea el título de una película Que nueve años (o diez) no es nada: Curry de coliflor Alcanzar la luna: ponche navideño Comamos y leamos: habas con guisantes Y mucho menos fácil: bocados de calabaza Borsch: el verdadero calor Una vida bohemia: mousse de café instantánea También somos lo que fuimos: el pisto de mi tía y las espinacas con garbanzos de mi madre Una ventana abierta: tostada de aguacate La ola que te arrastra: bizcocho de flor de cerezo Entra: el agua está buena. Tacos information action ratio Carta al padre: Bloody mary Parece que hay un incendio: Shakshuka ¿Os aburro cuando hablo de mis sueños?: Pastel de cerezas y semillas de amapola Ready to star: parpadelles de calabacín con salsa de coliflor Sabedlo: ensalada de zanahoria y cacahuete Así entra la luz: ensalada de aguacate y cítricos ¡A divertirse!: Galletas saludables El presente de nuestro pasado: maskool El dolor a cámara lenta: pastelitos de naranja sanguina Lo que no se ve: huevos revueltos Querido David: pizza de coles de bruselas y limón «Lo que dijimos nos persigue»: blueberry tahini smothie Un halo: turrón de Jijona «Nadada tanto miedo como el frío»: trufas de cacao y boniato «Tan alto contigo»: tarta vegana de boniato morado Quiero saber dónde está: sopa de zanahoria y crema de almendras Caminar sin pies: trufas veganas Frutos extraños: desayuno de boniato con crumble de pipas Tallos que terminan en flores: queso vegano Pequeños paraísos: helado vegano de fresa La realidad de lo real: cuscus de coliflor Verano de 2017: compota de ciruela sobre brioche No hay noche sin mañana: tarta sin hornear de pesto Unas palabras en italiano: gelato di tuttifrutti Comerse la alegría: ajoblanco de anacardos con flores Tu sangre en mis venas: sandwich vegano de matcha Hace calor: sopa fría de aguacate y pepino Cosas del mundo flotante: brownie «sano» con cerezas Presencia de una ausencia: açai bowl Un helado para una niña mala: vegan frozen yogurt Nabos asados El secreto de inocencia: Pistachio ice cream Una caricia de primavera:pastel de arándanos Beet humus Las reglas del juego: rabanitos encurtidos Red velvet chocolate Al rescate: Chinese vegan noodles Sopa de berros y garbanzos especiados Sweet hummus Reflexionando entre vegetales La poesía de la vida: Crema de boniato y zanahoria «Cada año vuelvo a ponerlo en la mesa»: vegan lebkuchen Metadiarios: protobellos asados París no se acaba nunca: sopa de cebolla Construir la alimentación: buñuelos de zanahoria El otoño es una galleta: crackers El porvenir: pudín de chía y aguacate Un viaje interestelar: mini donuts veganos Falalfel vegano de calabaza y garbanzo Otro modo de mirar: pastel vegano de queso y remolacha Esto no es una palurdez: Pastel de queso y peras Encuadre: la belleza. Algodón de azúcar Una de dos: Polos de chía y kiwi Tortilla de flor de calabacín y tomate Nos espera Septiembre Todo es verde Todo es amarillo Morado: Una paradójica alegría Dos nuevas razones por las que amarás el rojo ¿Cómo se pueden comer cosas blancas?